Tras dedicarle una mañana al pequeño principado de Liechtenstein, tocaba seguir la ruta de retorno a Suiza. Habíamos leído que cerca de donde estábamos, en el cantón suizo de los Grisones, se hallaba el pueblo de Maienfeld en cuya ubicación se basó uno de los mayores éxitos de la literatura infantil: Heidi.
En el año 1880 la escritora suiza Johanna Spyri se inspiró en los alrededores de esta aldea para crear la cabaña de los Alpes suizos a la que una pequeña niña llamada Heidi, al quedar huérfana, tuvo que ir a vivir al cuidado de su malhumorado y solitario abuelo. Las aventuras de la pequeña, en compañía de Pedro, Clara, Niebla y Copito de Nieve, tuvieron tal éxito que desde su publicación original fueron traducidas a más de 50 idiomas y se han volcado al mundo audiovisual en forma de varias películas y, lo que quizás sea lo más conocido, en una serie de dibujos animados.
Dado que la aldea a la que la joven se ve obligada a mudarse en el libro original se llamaba Dörfli, la localidad de Maienfeld, aprovechando el tirón del famoso personaje, creó la Heidi-Dorf (casa de Heidi), un antiguo caserón de la zona que ha sido reconvertido en museo, incluyendo en ella muchos de los detalles presentes en el libro original tales como utensilios de cocina, muebles de la época, los ropajes del abuelo e incluso la silla de ruedas de su amiga Clara.
Conforme nos acercábamos con el coche a Maienfeld, comenzamos a encontrar señales en la carretera de acceso que nos indicaban el camino a seguir hasta llegar al parking de Heidihof, el hotel–restaurante que se encuentra en la zona. Desde allí un pequeño camino nos condujo hasta la casa-museo. Comenzaban a verse esculturas en referencia a las historietas de Heidi.
Tras echar un vistazo a la casa por fuera, fuimos a la tienda donde se venden los tickets para visitarla. El precio de la entrada para adultos es de 9,90 Francos. Allí podremos optar también por ver una exposición dedicada a Johanna Spyri que cuesta otros 9,90 Francos. Existe también una entrada combinada para la exposición y la casa que vale 14,80 Francos. Nosotras nos centramos únicamente en la casa-museo, que ya me pareció bastante cara. En la tienda también podremos encontrar una oficina de correos, concretamente la más pequeña de Suiza, que cuenta con un sello especial del pueblo de Heidi (algo curioso para la gente a la que le guste la filatelia).
La entrada te da acceso a la casa de tres pisos blanca y con tejado y ventanas de madera que recrea la que pudo ser la casa de la niña. Así, en la planta baja pudimos ver el establo o almacén, en la primera planta se encuentra la sala de estar, la habitación del abuelo, la cocina y el baño y en la tercera, la habitación de Heidi y la zona de trabajo del abuelo, con una recreación de la silla de ruedas de Clara. También se ha habilitado en un rincón de la casa una pequeña zona dedicada al libro con algunos ejemplares traducidos en varios idiomas. Para acabar el recorrido salimos al jardín que rodea la casa.
Desde allí se puede completar la visita subiendo hasta HeidiAlp, la verdadera casa de la joven, situada en lo alto de la montaña y a la que se accede por un camino de tierra conocido como Heidi-weg que cuenta con 12 paradas (a modo de via-crucis) con paneles que hablan de la escritora, de su relación con la zona y que narran la historia de Heidi.
Nosotras no nos veíamos con ganas de invertir dos / tres horas en la ascensión hasta la otra casa, además el tiempo no se preveía muy estable y amenazaba lluvia… Así que nos acercamos a ver el recinto de animales (mayoritariamente cabras) que había al lado de la tienda y las vistas que había desde allí, para regresar después a la zona parking. Dadas las horas que eran decidimos comer alguna de las especialidades suizas en el restaurante, antes de partir hacia la otra parte del país en dirección a las cataratas del Rin.
Justo antes de marchar, unos lugareños nos sorprendieron y deleitaron con una pequeña muestra del sonido del cuerno alpino (primera y única vez hasta la fecha que he oído el instrumento).
¿Cómo llegar al pueblo de Heidi en Maienfeld?
Evidentemente, lo más cómodo es ir en coche dirigiéndose a Bahnhofstrasse, 1 – Maienfeld. Sin embargo si no se tiene este privilegio, se puede ir en tren hasta Maienfeld y desde allí caminar unos 30 minutos hasta la Heididorf.
¿Qué horarios tiene la Heididorf?
La casa-museo está abierta todos los días entre el 15 de marzo y el 15 de noviembre desde las 10:00 hasta las 17:00 horas.
¿Hay otros lugares relacionados con Heidi en Suiza?
Y, aunque éste es el pueblo en el que la autora se inspiró para crear el libro original, existen en Suiza otros lugares relacionados con el famoso personaje. Por ejemplo, a dos horas de coche de la Heididorf se puede visitar la cabaña que se utilizó para grabar la película de Heidi del año 1952 y que se encuentra en las cercanías de St. Moritz (concretamente en la Via Salastrains 10, 7500 St. Moritz).
 |  |  |
Oye qué curioso! no tenía de que existiera la "casa de Heidi" jeje, es un poco caro pero yo crecí con esos dibujos animados que eran más penosos que alegres, pero bueno, era lo que había y flipábamos cada semana con el episodio que tocase, así que si voy por la zona me acercaré al menos a ver lo que vosotras. Un saludito.
ResponderEliminarOye qué curioso! no tenía de que existiera la "casa de Heidi" jeje, es un poco caro pero yo crecí con esos dibujos animados que eran más penosos que alegres, pero bueno, era lo que había y flipábamos cada semana con el episodio que tocase, así que si voy por la zona me acercaré al menos a ver lo que vosotras. Un saludito.
ResponderEliminarSuiza es fabuloso y ademas no sabia que en realidad existía la casa de Heidi.
ResponderEliminarBuscare algunos paquetes con hotel y viajare hasta allá para recordar y cumplir sueños de mi infancia.
¡Hola!
ResponderEliminar- Calíope, la verdad es que mirando los dibujos retrospectivamente de alegres tenían poco... pero sí, yo era también de no perderme un capítulo. La visita no es nada del otro mundo pero no deja de ser un lugar curioso y con esos bonitos paisajes suizos
- Javier, bueno, una casa situada en la zona que inspiró a su escritora...
Un saludo :)