Hoy os quiero llevar de nuevo en
el blog a la región francesa de Nord Pas de Calais, concretamente a Lille, una
ciudad que, como ya os avancé, para mí fue una auténtica sorpresa. Su pequeño casco
histórico, muy cuidado, con calles adoquinadas hacen que sea una localidad
ideal para recorrer a pié, o de la original forma en la que nosotros lo
hicimos, mediante una visita en un
coche de tipo “2 caballos”.
Así temprano por la mañana nos
dirigimos a la Grand Place, la
principal plaza de la ciudad y núcleo histórico (con un gran parecido a la
homónima de Bruselas) donde ya estaban preparados los dos coches 2 CV
descapotables de la empresa Tradibalade, con una estética retro muy atrayente,
dispuestos a mostrarnos la ciudad.
Os dejo un pequeño vídeo resumen
de nuestra visita para que veáis lo chulos que íbamos nosotros en los
cochecitos y cómo recorrimos la ciudad:
Y, como no recuerdo exactamente
bien cuál fue la ruta que hicimos, me limitaré a hacer un resumen de los puntos
de interés de la ciudad, que tuvimos ocasión de ver en nuestra ruta en coche.
Una primera parada antes de
montar en el coche, para tomar información en la actual oficina de turismo, nos
llevará al antiguo Palais Rihour, un
palacio del siglo XV que sufrió un importante incendio en el siglo XVIII, pero
del que aún se conservan algunas de sus partes originales.
La Plaza Mayor, Place du Général
de Gaulle o Grand Place, lugar de
comienzo de la excursión en el 2 caballos, es un lugar de paso obligatorio en
la ciudad de Lille. Con un gran parecido a la homónima plaza de Bruselas
(aunque en pequeño) ésta es la principal plaza de la ciudad y núcleo histórico de
la misma y en ella se levantan diversos palacios.
Cercana a ésta (hacia el sur) se
halla la iglesia gótica de Saint-Maurice
que cuenta con cinco naves de 36 m de altura y que alberga en su interior una
estatua de madera de la Flagelación del siglo XVI.
Justo detrás de la Plaza Mayor se
halla la Plaza del Teatro, donde se
encuentran el edificio de la ópera y la actual Cámara de comercio e industria,
con una gran torre levantada tras la I Guerra Mundial.
Frente a éstos, en el lado sur de
la plaza se encuentra la antigua Cámara de comercio e industria, un edificio de
dos pisos que rodea un patio porticado de estilo barroco, cuya fachada oeste da
a la Grand Place.
Al sur de la plaza del teatro, se
encuentra el centro comercial de la ciudad con calles peatonales repletas de
pequeñas tiendas y centros comerciales, mientras que al norte de la Plaza se
halla el casco antiguo o histórico, el Antiguo
Lille, que aún conserva el trazado medieval de sus calles. De hecho, en una
de esas calles, en la Rue de Gand,
se conserva el último vestigio de las murallas de la ciudad, una puerta
construida durante la ocupación española en 1617 que, curiosamente (por si el
nombre no da una pista) conducía a Gante.
Por allí cerca se levantan algunas de las iglesias de la ciudad: Ste Marie Madeleine (con una cúpula de 50 m de altura), la Catedral de Notre Dame de la Treille (con un curioso estilo moderno), la iglesia del siglo XVIII de St André y la iglesia gótica de Ste Catherine, que posee en su interior un cuadro de Rubens, el Martirio de Santa Catalina.
Un lugar muy agradable que vimos en nuestra visita con el coche fue el Muelle Wault con bonitas edificaciones custodiándolo y cercano a la plaza Foch (uno de los parques de la ciudad), se abría ante nosotros como un lugar pintoresco en el que pasear.
Cercano a él se encuentra la Ciudadela que, diseñada por Vauban
en tiempos de Luis XIV, fue parte del sistema defensivo de la ciudad. Actualmente
aún tiene un papel militar pero sus instalaciones (y el anexo zoológico) pueden
ser visitados durante todo el día.
Una mención especial requiere el Palacio de Bellas Artes que, en el
interior de un impresionante edificio del siglo XIX, alberga una importante
colección de pinturas flamencas, holandesas, italianas, españolas y francesas,
de autores de la talla de Goya, Rubens, Van Dyck, Delacroix, Monet, Renoir y
Toulouse-Lautrec entre otros.
Por último, visitamos el Ayuntamiento con Campanario Porte de Paris, que con una arquitectura de ladrillo
típica flamenca impresiona con sus 104 metros de altura. Frente a ellos, a pocos
metros, se levanta también la Porte de
Paris, un gran arco de triunfo erigido en honor de Luis XIV entre 1682 y
1695 por el arquitecto Simon Vollant, que originalmente formaba parte de las
murallas de la ciudad.
Y, aunque nosotros no lo
visitamos, otro lugar interesante puede ser la “Maison Natale Charles de Gaulle” el museo que se ubica en la casa
donde Charles de Gaulle nació el 22 de noviembre de 1890 con muebles y otros
objetos personales del célebre personaje.
Así pues, espero haberos sabido
transmitir (con ésta y las entradas anteriores) todo lo que esta ciudad de la
desconocida región de Nord Pas de Calais tiene para ofrecer.
que bueno!!! una forma muy curiosa de visitar una ciudad. Lille me ha gustado mucho!! Un abrazo
ResponderEliminar¡Qué forma más divertida de conocer Lille! A mí me has convencido de que vale la pena visitarla. Un abrazo!
ResponderEliminar¡Hola chicos!
ResponderEliminar- Fran, desde luego! A mi me resultó supercurioso. Nunca había montado en un coche de este tipo y, lo cierto es que todo el mundo nos miraba, jejeje
- Alícia, un tour superdivertido. Me alegro de haberos podido dar a conocer esta zona que, salvo por la película de Bienvenidos al Norte, no es muy conocida...
Un saludo y gracias por pasar por aquí y animaros a dejar un comentario :hello:
Bonita ciudad y recorrerla en dos caballos es un punto, je je, me trae buenos recuerdos ese modelo de coche. Un besote y a pasarlo bien en los Pirineos :)
ResponderEliminarNo pensaba yo que Lille fuera una ciudad tan monumental, parece muy interesante. Prefiero conocer las ciudades caminando pero lo del carro de caballos me lo apunto por si algún día llevo allí a mis padres. Una manera ideal de no cansarse.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué bonita Lille! Solo la conocía de oídas y me ha gustado mucho. Muy original lo de los cochecitos :) Después de soñar con ballenas cuando leí tu post ahora soñaré con los coches, verás, jajajaja. Un abrazo!!!
ResponderEliminarSiempre habíamos oído grandes cosas de Lille, leyéndote queda claro que los comentarios estaban a la altura :P Recorrerla en un dos caballos tuvo que ser inolvidable!!
ResponderEliminarQué manera más curiosa de conocer una ciudad? en París los habíamos visto, pero al final no nos decidimos. Apuntada queda Lille para cuando podamos volver por Francia, me parece una ciudad preciosa.
ResponderEliminar¡Hola chicos!
ResponderEliminar- Calíope, ya recuerdo que me comentaste algo en una entrada anterior, jejeje...
Ya estamos de vuelta del #ReservingTrip. Ahora a preparar las crónicas para contároslo todo ;)
- M. Teresa, yo también soy de patear ciudades, y más si son pequeñitas y con un casco histórico reducido. Pero, como dices, es una buena opción para ir con gente mayor o por si te quieres dar un lujo un día
- Aran, jajaja, ya me contarás... de Capitán Pescanova a Chiti chiti bang bang, jajaja (o lo del Chiti le viene que ni al pelo, porque a la gente de allí les llaman así)
- Edu y Eri, una experiencia divertida y original, desde luego. En la guía general algo hablé de Lille, pero quería dejar algo escrito sólo de ella porque fue una ciudad que me sorprendió bastante
- Verónica, lo malo de hacerlo en París es su caos circulatorio.,, En Lille no se tiene ese problema y les puedes pedir que paren cuando quieras, que pasen de nuevo por un lugar, etc. Los guías, además, eran supermajetes y lo pasamos de maravilla. La verdad es que éramos el centro de atención de otros turistas que recorrían la ciudad a pie, muchas se giraban a vernos y a hacernos fotos...
Un saludito a todos y gracias por vuestros comentarios :hello:
Pues no lo pensaba, pero a lo mejor me daré una vuelta por esa ciudad, mi novia y yo estamos planeando un viaje por Francia antes de finales de año y estamos haciendo el itinerario, vamos a ver si incluimos Lille, un saludo
ResponderEliminarHace unos meses estuvieron unos amigos por Lille y también nos hablaron muy bien de la ciudad, encima vosotros en ese paseo en 2 cv que gozada :D
ResponderEliminarLa verdad que Francia tiene ciudades bien chulas, pero la mayoría de las veces nos centramos ne las más típicas.