Visita a Ek Balam, en Yucatan

Debian ser sobre las 6 de la mañana cuando nos despertamos en el hotel Kavia de Cancún. La verdad es que este ritmo (o efectos del jet-lag) lo tuvimos durante todo el viaje pues, en general, nos estuvimos levantando bastante temprano y acostándonos temprano también. Pero bueno, esto nos permitió aprovechar los días al máximo.

Hoy tocaba comenzar nuestro road-trip. Pero antes de partir decidimos comer algo en la cafetería del hotel. En desayuno no estaba incluido en el precio de la habitación, pero, la verdad es que, por un precio irrisorio, podías tomar algo en la cafetería anexa al hotel.

Así, con las pilas cargadas, iniciamos nuestra ruta por la Península del Yucatán.

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

Teníamos mucho planificado para ese día y como aún no conocíamos el estado de las carreteras mejicanas, decidimos ir por la autopista de pago, aunque habíamos leído que era bastante cara. Lo que no habíamos leído es que prácticamente todo el trazado de la carretera estaba en obras, con lo cual, velocidad limitada, sin tener dos carriles a disposición… en fin, al final pagamos por la carretera y creo que no ganamos especialmente en tiempo.

Autopista en Yucatán

En general, no entiendo por qué durante las obras siguen cobrando las autopistas de peaje a un precio completo (en cualquier país). Al parecer están haciendo un tren, “el tren maya”, para facilitar a los turistas el acceso a los principales recintos arqueológicos de la península. Un proyecto que ha suscitado gran controversia en el país, pero que finalmente se está realizando. 

Tras unas 2 horas o 2 horas y pico de conducción llegamos a nuestra primera, Ek-Balam, una antigua ciudad maya situada a tan solo 26km de la ciudad de Valladolid. Al llegar al aparcamiento del recinto arqueológico un chico se acercó y nos dijo que, aunque el parking era gratuito, ellos estaban allí para cuidar los coches a cambio de una propina. En definitiva, te están obligando a pagar. La verdad es que en Yucatán toca pagar por todo, lo iríamos descubriendo conforme fueran pasando los días de viaje…


¿Cuánto cuesta la visita a Ek Balam?

Las ruinas de Ek-Balam, eran las primeras ruinas mayas que veíamos y aunque a la entrada se puede contratar el servicio de guías, decidimos visitarlas por nuestra cuenta (teníamos en mente contratar un guía el día siguiente para visitar Chichen Itzá).  El precio de la entrada era de 490 pesos mexicanos (de los que 90 pesos son para el sitio arqueológico y el resto es para la tasa del Gobierno).


La historia de Ek Balam

Ek Balam quiere decir en español “Jaguar Negro” y fue uno de los centros habitados más importantes de la zona este de Yucatán especialmente entre los años 700 y 1000 a.C cuando alcanzó su máximo esplendor. La ciudad fue el centro de poder del reino Tlalol. Su primer rey, Ukit Kan Le’t Tok, es el que que construyó la gran pirámide de Ek Balam (conocida como Acrópolis), que es el edificio más alto de toda la región. El rey fue enterrado dentro de la acrópolis en una habitación llamada la Casa Blanca de la lectura con unas 7000 piezas de cerámica y otras riquezas.


¿Qué ver en Ek Balam?

Después de comprar los tickets, hay que caminar un poco hasta la entrada y, tras la entrada, seguir un poco más hasta comenzar a encontrar ruinas.

Mapa del recinto arqueólogico de Ek Balam

En nuestro caminar nos fuimos topando con las siguientes estructuras:

Las murallas: lo primero que se ve. Tenían la función de delimitar el recinto sagrado de la zona residencial.

El arco de entrada: es un arco con cuatro puertas, cada una de ellas apuntando a un punto cardinal. Es una construcción bastante particular que no suele verse en otras ruinas mayas. Se cree que esta puerta estaba conectada con una antigua carretera llamada “sacbe”. Los sacbes unían las principales ciudades mayas, en este caso se cree que conectaba Ek Balam con Chichen Itza y Cobá.

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

Tras la puerta de entrada nos encontramos con las pirámides gemelas, dos pirámides idénticas sin demasiada altura.

A continuación, el Palacio Oval, el segundo edificio más alto de la ciudad y al que también se puede subir.  Como su nombre indica, tiene forma oval en la parte trasera. En su interior se han encontrado reliquias de enterramientos y se cree que se usaba para ceremonias cosmológicas. Desde lo alto de la pirámide hay unas bonitas vistas del resto de la ciudad.

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

Desde allí nos dirigimos hacia la Estructura 10. Se trata de una estructura de 43 metros de largo por 30 m de ancho y 5 metros de altura. En su parte superior hay tres estructuras más.

El Juego de pelota, el famoso juego tan habitual en la cultura maya. Dos equipos luchaban para intentar pasar la pelota por uno de los aros, pero sólo podían hacerlo tocándola con la cabeza, codos, rodillas o caderas.

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

Y finalmente la Acrópolis, el edificio más importante de la ciudad, en el que residían los altos cargos y los gobernantes. Es uno de los edificios mayas más grandes de toda la península de Yucatán y sin lugar a dudas el más impresionante de la visita. Se puede subir hasta arriba y hay unas vistas maravillosas al resto de ruinas mayas.

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

La acrópolis es bastante diferente de otras pirámides mayas, debido a las habitaciones existentes en sus lados (ahora mismo cubiertas con palmas para protegerlas). Conforme se sube a la pirámide podemos hacer una parada en estas estancias o santuarios. En ellas descubriremos esculturas en estuco originales y a mano izquierda la tumba del rey Ukit Kan Le’k Tok’.

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

En general en las ciudades mayas se han encontrado esculturas hechas en piedra, pero muy pocas son en estuco tal y como ocurre en Ek Balam. Entre estas esculturas podemos distinguir figuras de guerreros, pero también estructuras en forma de dientes justo en la entrada a las salas, como si fueran la boca de un monstruo, que para los mayas podría ser la entrada al inframundo.

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

Con mi miedo a las alturas, la escalada (y posterior descenso) a la gran pirámide, se convirtió en todo un desafío, pero después vendrían muchas más y, sin lugar a dudas, merece mucho la pena subir (además, para el final del viaje mi forma física mejoró sobremanera, jejeje).

Recinto arqueológico de Ek Balam, Yucatán

Tras haber visto los principales recintos, emprendimos el camino de regreso hacia el parking. Todavía quedaba mucho día por delante, pero lo continuaremos en la próxima entrada.


Otras formas de visitar Ek Balam

Si no tenéis pensado alquilar un coche, siempre podéis contratar un tour organizado, que es una de las alternativas más cómodas. Aquí os dejo una selección con las mejores excursiones a Ek Balam desde varias ciudades de México: 

Mimaletayyo Logo

Helena - Mimaletayyo

Ingeniero de caminos de profesión, la pasión por viajar y su curiosidad por conocer mundo ha hecho que dedique parte de su tiempo a ello. Entusiasta por conocer vestigios de antiguas culturas y civilizaciones, pero también naturaleza y modo de vida actual.

No hay comentarios:

Publicar un comentario